El envasado flexible es una solución muy versátil que utiliza películas de plástico monocapa o multicapa, o materiales compuestos multicapa finos (obtenidos combinando películas de plástico laminadas con láminas finas de celulosa y/o aluminio y/o con películas de plástico recubiertas o metalizadas). A partir de estos materiales flexibles (laminados, compuestos multicapa), se crean envases que se adaptan a la forma del contenido.
El flowpack es un tipo de envase que consiste en una bolsa rectangular fabricada con una película flexible soldada para formar un tubo, que se sella en ambos extremos y se corta posteriormente. Se utiliza para:
- Productos sólidos (panadería, confitería, frutas y verduras, y algunos medicamentos)
- Granulados (arroz, pasta, alimentos congelados)
- Polvos y líquidos
Este envoltorio protector (PE, PP, PET, PA) mejora la conservación del producto, es ligero y resistente. El flowpack evita la alteración de las características organolépticas de los productos y presenta la mejor relación entre el peso del envase y el del contenido. Por ejemplo, un paquete de galletas pesa 36,75 gramos y su envoltorio solo 0,60 gramos. Además, el flowpack reduce el desperdicio de alimentos, ya que prolonga su vida útil y permite porcionarlos y almacenarlos de forma segura.
El producto tiene una segunda piel que, desde la perspectiva del consumidor, forma parte del mismo producto y, en ocasiones, participa en su uso (por ejemplo, al agarrar una tableta de chocolate). La manipulación, el modo y el punto de apertura son aspectos que un buen envase debe garantizar y comunicar de forma sencilla e intuitiva.
En términos de usabilidad, si la apertura es difícil, puede provocar "frustración de envase" en el consumidor, es decir, una experiencia negativa que compromete la percepción del propio producto. Los sistemas de apertura fácil, por el contrario, permiten abrir los envases de forma limpia, rápida y sencilla, y hacen que la dirección y el punto de rasgado sean gráfica y cromáticamente evidentes (por ejemplo, el rayado de las bolsitas monodosis de salsas y condimentos).
En los supermercados, el 50 % de los envases son flexibles. Estos envases pueden estar fabricados con películas poliméricas de origen fósil o de origen orgánico renovable. Existen películas estándar y especiales de polipropileno orientado biaxialmente (BoPP), polipropileno fundido (CPP) y películas biodegradables mediante compostaje industrial (PLA).
En el futuro, será cada vez más importante el uso de materias primas alternativas, biobasadas a partir de fuentes renovables y granulados procedentes de procesos de reciclado. También será importante el uso de soluciones compostables que puedan ofrecer un escenario de fin de vida diferente.
El mundo de los envases debe ser capaz de conseguir mucho con poco, utilizando cantidades mínimas de material y reduciendo los costes y el impacto ambiental, manteniendo al mismo tiempo altos niveles de calidad.
Ventajas del flowpack
El flowpack, gracias a su ligereza, optimización logística, gran superficie de comunicación y protección hermética, es un excelente ejemplo de equilibrio entre rendimiento y optimización de recursos.
- Ligereza: reduce los costes y optimiza el espacio durante el transporte y el almacenamiento.
- Velocidad de envasado: el proceso de envasado hace que este envase sea muy eficiente desde el punto de vista de la producción
- Sin residuos: por cada unidad de producto envasado, se utiliza una cantidad reducida de material.
- Sellado: el sellado seguro evita la contaminación y las filtraciones, al tiempo que preserva la calidad, la higiene y la seguridad a largo plazo
- Diseño: muy adecuado para el comercio electrónico
Los gráficos y la información del envase ya pueden personalizarse para transmitir mensajes de marca (incluso únicos por envase).
El tratamiento corona mejora la adherencia de las superficies de material plástico, por lo que la película es adecuada para el anclaje de tintas, adhesivos y barnices. Si se aplica el tratamiento corona a la superficie del material plástico antes de la impresión, aumenta la calidad de los gráficos y la durabilidad de la información impresa, garantizando un mejor rendimiento visual y comunicativo, además de facilitar la interacción entre el consumidor y el producto.
Embalaje: se refiere a los aspectos de comunicación, información y servicio del producto. Envase: se refiere a los aspectos estructurales y materiales del producto, así como a su función de protección, conservación y optimización logística.
- Envase primario: envasa el producto individual listo para el consumo
- Envase secundario: agrupa varias unidades del mismo producto ya envasadas en su envase primario
- Embalaje terciario: facilita la manipulación y el transporte de las mercancías
Fuente: Flowpack: lo máximo con lo mínimo. Alta protección con bajo impacto, de Edizioni Ambiente, ISBN 978-88-6627-357-8.